¿A quién no le pasó de perder algo en el transporte público? Un paraguas olvidado en el tren, una mochila en el colectivo, el celular que se desliza entre los asientos del subte. Cada día, miles de objetos se extravían en los sistemas de transporte, y encontrar a su dueño puede ser un rompecabezas logístico. En Japón, donde el volumen de objetos perdidos es altísimo, están recurriendo a una aliada inesperada para enfrentar el problema: la inteligencia artificial.
El gobierno del país asiático ha comenzado a implementar un sistema de IA desarrollado por la empresa Takashima para clasificar y devolver objetos perdidos con mayor eficiencia. A través de algoritmos que procesan imágenes y descripciones, la IA puede emparejar objetos hallados con reportes de usuarios en cuestión de minutos.
Esta innovación ya se utiliza en prefecturas como Osaka y ha tenido un impacto concreto: la tasa de recuperación de objetos pasó del 10% al 30%. Una mejora notable, que no sólo acelera el reencuentro entre personas y pertenencias, sino que también alivia la carga de trabajo del personal encargado. Este tipo de avances demuestra cómo la tecnología puede aportar soluciones prácticas a problemas cotidianos.

